Doce meses bloggeando
Pasa el tiempo como siempre sin que nos demos cuenta, sin embargo cada año pasan tantas cosas que deberíamos pararnos a pensar en ellas. Y no precisamente con la resaca del año nuevo. Yo ahora lo pienso porque una parte os la he contado, otras puede que las haya inventado y las mejores quizás son las que no he contado pero las habéis entendido igual. Ahora vuelven a caer las hojas, tiñendo todo de amarillos, que luego serán rojos para acabar cubiertos por el blanco y negro del invierno sueco. Así vuelve a ser todo igual, dandonos la seguridad de lo previsible. Sin embargo, un año antes, cuando llegué a Uppsala con mi mochila y mi sorpresa ante el frío y las bandadas de pájaros no tenía mucho previsto. Y mejor así pues creo que no es la vida la que se ajusta a nosotros y al final lo mejor que se puede hacer es escuchar una guitarra y responder con un poco de imaginación.
Miro para atrás y me sorprende que en estos meses me dieron un doctorado, Moni tuvo un bebé precioso, hicimos un viaje increíble a Argentina, entiendo casi todo cuando hablan en sueco (énfasis en casi), he conocido a mucha gente interesante, comprado un trozo de piso para el banco, conducido un camión de mudanzas y seguido con mi blog.
Y luego están las cosas que faltan, lo que espero poder decir dentro de un año, quiero aprender muucho mejor el sueco, volver a dar clases en la uni, mejorar con mi guitarra, aprender algo de programación... Uy me estoy dando cuenta de que mi pensamiento adelanta por mucho a las palabras y que esta lista se podría hacer eterna.
Bueno espero que no tenga el mismo efecto en vosotros porque yo me estoy durmiendo...Y que gracias por seguirme leyendo, aunque se os trabe la tecla de los comentarios. Yo intentaré escribir mejor y en más idiomas (aunque esto no interese mucho)y cuando esté más despierta!
0 Comments:
Publicar un comentario
<< Home